Este jueves llega a la cartelera nacional la nueva película del director de “Parásitos”, Bong Joon-ho: “Mickey 17”. Protagonizada por Robert Pattinson, junto a un reparto estelar que incluye a Mark Ruffalo, Toni Collette y Steven Yeun, esta comedia negra promete sacudirnos tras la temporada de premios.
Basada en la novela “Mickey 7” de Edward Ashton, la historia sigue a Mickey Barnes, un ingenuo trabajador en una expedición humana para colonizar el helado mundo de Niflheim. Mickey es un empleado “prescindible”: cada vez que muere, se regenera con la mayoría de sus recuerdos, pero en un nuevo cuerpo. Cuando, debido a un error, dos versiones de sí mismo se cruzan, se desatan una serie de inconvenientes y cuestionamientos sobre su rol en esta sociedad, la vida y la muerte.
Una mirada ácida al sistema
La sola premisa de un trabajador descartable es una crítica al sistema capitalista en sí misma. Y ese es el punto de partida que Bong Joon-ho usa para lanzar unos cuantos dardos más a la forma en que se mueve la sociedad. No se salvan ni los políticos populistas de ridículo histrionismo, ni las personas que, al parecer, se ganaron el derecho a ser escuchadas por el simple hecho de tener dinero (aló, ¿están por ahí Donald y Elon?). Tampoco se libran los sinvergüenzas dispuestos a traicionar a quien sea con tal de obtener provecho y “surgir” en esta descarnada escala social.
Sumado a lo anterior, el cineasta nos propone cuestionamientos sobre la relación de los seres humanos con otras especies. Ya lo vimos en uno de sus títulos más populares, “Okja”. Y aunque es uno de los aspectos más convencionales del guion y su desarrollo es un poco predecible, siempre se agradece un tirón de orejas que nos empuje a la empatía.
Ahora bien, lo mejor de todo es que, a pesar de la profundidad político-filosófica que puede alcanzar “Mickey 17”, nunca se toma demasiado en serio a sí misma. Ante todo, incluso con el bien logrado acercamiento a la ciencia ficción, no deja de ser una comedia. De este modo, se posiciona lejos del sermón aleccionador, balanceando con maestría la fuerza de su discurso con un humor que, a veces, roza lo absurdo, arrancando más de una risa.
Robert Pattinson y su versatilidad
Es imposible hablar de “Mickey 17” sin dedicar unas merecidas palabras a Robert Pattinson. El actor sigue demostrando que es mucho más que un vampiro brillante, haciendo gala de su versatilidad. Su interpretación es fundamental para el corazón de la película cuya narración, por momentos, adopta esa actitud “inocentona” de Mickey que Pattinson plasma de gran manera. Además, dar vida a más de una versión del personaje le permite demostrar su amplio rango interpretativo.
No queda más que invitarlos a disfrutar de “Mickey 17” desde este jueves 6 de marzo en los cines del país. Una película que no está hecha para pasar desapercibida y que merece completamente la pena.
